Casi diez días después del reinicio de los entrenamientos de los actuales subcampeones del béisbol cubano, el 8 de agosto trascendió la inclusión en la preselección agramontina de Damián Leyva, atleta que no estuvo en la primera parte de la preparación, detenida por la pandemia. Leyva, quien fuera jugador de cuadro de elencos camagüeyanos hace ya varios años, reapareció en la concentración de su provincia convertido en lanzador. Pero la novedad se pone más interesante, pues algunos reportes dan crédito de que su velocidad llega hasta 94 millas por hora.
Luego, la página en Facebook Los Toros de la Llanura publicó una declaración de José Manuel Cortina, reconocido entrenador de pitcheo pinareño, quien asesora el trabajo de los serpentineros agramontinos, y el curtido preparador resaltó el nivel de algunos atletas jóvenes y aseguró que Leyva tenía aptitudes para laborar como cerrador.
Cubalite intercambió con un pelotero del elenco dirigido por Miguel Borroto y este confirmó los planes del cuerpo técnico de utilizarlo como taponero debido a su velocidad. La fuente agregó que su ausencia en el equipo divulgado la semana pasada, el cual intervendrá en la Serie 60, se debe a que aún no ha completado el proceso de repatriación, pues el derecho regresó a Cuba a inicios de este año, procedente de República Dominicana.
Una explicación similar ofreció a los medios de comunicación el manager Borroto y aclaró que el jugador podrá subir al conjunto cuando finalice sus gestiones. Según el reglamento del campeonato, el ascenso podría realizarse luego de concluidos los partidos 30, 40 o 74.
El veloz serpentinero, que cumplirá 26 años en diciembre, salió hacia Dominicana en el primer semestre de 2015. En entrevista concedida al canal de YouTube La comarca de los toros, Damián dijo que marchó en busca de un contrato profesional, pero las cosas no le salieron bien por territorio quisqueyano. Su retorno a la Isla se debió a que su hija quedó huérfana y él decidió estar junto a ella para criarla.
“Un scout me vio tirando desde tercera base y después de un juego me probó encima del box, tiré 94 millas. Él me sugirió que comenzara a lanzar. Estuve en varias academias y permanecí tres meses en la de Hiroshima, un equipo japonés, donde me hicieron toda la preparación como pitcher. Los japoneses trabajan súper bien, adelanté mucho en pocos días y llegué hasta 96 millas. Me desarrollaron el slider y el cambio de velocidad, me vieron como posible cerrador”, declaró Leyva en la entrevista de marras y añadió que sus habilidades como jugador de cuadro le ayudarán en el montículo.
Damián, oriundo del municipio Guáimaro, pero residente en la actualidad en Nuevitas, fue uno de los jugadores subcampeones en la edición primaria de la Serie Nacional Sub 23, en 2014, cuando el elenco comandado por el desaparecido Roly Hernández perdió en la final frente a Artemisa en tres partidos seguidos.
Participó en tres Series Nacionales, las dos primeras dirigido por Luis Guevara y la última bajo las órdenes del artemiseño Esteban Lombillo, quien en la temporada 54 prestó sus servicios a Camagüey. Defendió todas las posiciones del cuadro, excepto la inicial, y tiene promedio ofensivo en sus tres contiendas de .255, con 41 hits, 25 anotadas, seis dobles, un jonrón y 14 impulsadas. En 161 veces al bate tomó 31 ponches.
Ante algunas bajas por lesiones de lanzadores, la pronta incorporación de Leyva al staff monticular agramontino puede representar un alivio para el bullpen, sobre todo en los finales, contando con que él se adapte y rinda en su nueva función en la Serie Nacional, toda vez que será su primera experiencia como pitcher en un campeonato organizado.
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