Si has recibido un mensaje, por cualquier vía, que diga: “necesito un favor, escríbeme a mi WhatsApp”, o una frase similar, y has respondido, entonces puede que tengamos malas noticias para ti. Has caído en la lista de algún hacker y es probable que tu cuenta en ese servicio de mensajería esté en sus manos. Lamentablemente, en ese caso serías víctima de otro de los juegos sucios que se extienden a través de dicha plataforma. No son pocos los cubanos que han alertado sobre este método en las redes sociales.
Toda la trampa se oculta detrás del mensaje inofensivo en el cual te piden ayuda. En algunos casos dicen que enviaron por error un código a tu número. Cualquiera, con mayor o menor dominio de la tecnología, puede ceder ante una solicitud de auxilio. Por tanto, desde Cubalite queríamos alertarte sobre ello y, sobre todo, insistir en lo siguiente: NO seas tan amable, NO respondas a ese mensaje que pide ayuda desesperadamente.
Recapitulemos cómo funciona WhatsApp:
-Debes instalar la aplicación;
-Introducir un número de teléfono;
-Se envía un código de seis dígitos para acceder a la cuenta.
Al escribirle a su WhatsApp, como te solicita en el mensaje de ayuda, ya tendrá tu número, que luego usará para entrar a tu cuenta. El código de seis dígitos que pide la plataforma llegará a tu móvil vía SMS y este necesitará que se lo reenvíes. Cuando lo hagas, ya todo estará perdido. Es un modus operandi sencillo, pero puede llegar a causar mucho daño.
Al momento de reenviarle el código, entrarán en tu perfil, activarán la verificación en dos pasos, de modo que no podrás volver a acceder. La plataforma cierra sesión en tu teléfono y ahora el hacker está al mando.
Existe solución, pero el daño estará hecho. Lo mejor es prevenir y no caer en esas trampas. Para ello, ignorar el mensaje de ayuda es el primer paso. Reportar, denunciar y bloquear el contacto desde que lo recibes, puede ser lo siguiente. En la mayoría de los casos será alguien desconocido o, en cambio, usarán otro número de los ya hackeados para escribirles a las personas que tiene ese usuario entre sus contactos.
Para evitar el problema, antes debes activar la verificación en dos pasos, función que agrega seguridad a tu cuenta (recomendamos que esto lo hagas ahora mismo; aquí te dejamos el enlace para que aprendas a hacerlo). Si tampoco reaccionas al instante, deberás solicitar, desde el soporte de la aplicación, un nuevo código que tarda siete días. Para ese entonces, puede que sea tarde y tus intimidades hayan sido reveladas, tus contactos asediados o cualquier otra acción negativa que se le ocurra a quien tome control de tu perfil. Al usurpar tu identidad, puede hacerse pasar por ti y cometer estafas, delitos, pedir dinero, extorsionarte a partir de la información que almacenes, comprar… puede, incluso, apropiarse de otras cuentas que tengas asociadas a ese número.
En el centro de ayuda de WhatsApp alertan sobre mensajes falsos o sospechosos. Si el remitente dice que representa a esta plataforma, te promete gratuidades, librarte de cierta penalización o te pide reenviar credenciales (usuarios, contraseñas, códigos), “puede que esté intentando engañarte”. Su recomendación es que bloquees al remitente una vez recibido el mensaje, ignorando el contenido.
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