Después de la temporada 2012-2013 de la Serie Nacional cubana de béisbol, en la que Joan Carlos Pedroso Brooks jugó con su equipo de Las Tunas y como refuerzo con la Isla de la Juventud, el inicialista, aunque mostró ciertas intenciones, nunca más se desempeñó en el principal torneo de pelota de la isla.
Recuerden que el integrante de varias selecciones antillanas acumuló 16 campañas, con promedio ofensivo de .310, 895 anotadas, 1402 hits, 226 dobles, 300 jonrones, 991 impulsadas, 893 boletos y 971 ponches.
Luego de terminar en Cuba, intervino en una contienda de la primera división de Italia y posteriormente se trasladó a México, donde ha aprovechado cuanta oportunidad se le ha presentado como atleta y entrenador.
Primero defendió el uniforme de Cañeros de Los Mochis durante dos cursos consecutivos de la Liga Mexicana del Pacífico (2014-2015 y 2015-2016) y bateó .289, con nueve cuadrangulares, 32 remolcadas y OBP de .422. En ese período se destacó, por otra parte, en la Liga Norte azteca, con Freseros de San Quintín (2015) y Algodoneros de San Luis (2016).
Su etapa como preparador en el país vecino comenzó en 2017, al frente del bateo de Leones de Yucatán, y en los cuatro años siguientes ocupó esa responsabilidad en Saraperos de Saltillo, equipos del circuito azteca veraniego. Desde finales de noviembre de 2020 pertenece al cuerpo técnico de Cañeros, igualmente en funciones vinculadas con la ofensiva.
Recientemente, Pedroso (44 almanaques), despedido en julio pasado como coach de bateo de Piratas de Campeche, integró por primera vez el colectivo de entrenadores del conjunto Cañeritos de Los Mochis, que concursó del 25 al 27 de agosto en el segundo Torneo Infantil de la Liga ARCO Mexicana del Pacífico. En el estadio de los Yaquis de Ciudad Obregón compitieron 12 planteles de la categoría 11-12 años, distribuidos en tres grupos.
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