Fue en su etapa de pelotero juvenil cuando Michel Triana Moret enseñó, de verdad, la fibra de que estaba hecho. Aunque sin tener un torneo de ensueño, en el Campeonato Panamericano de México 2016 lució sus variadas cualidades. Un año después, ya un poco más maduro, de cara al Mundial de Thunder Bay, Canadá, él y el cienfueguero César Prieto encabezaban el conjunto cubano, en el que además estaban grandes promesas como el camagüeyano Loidel Chapellí Jr., el avileño Alfredo Fadraga, el villaclareño Víctor Mesa Jr., el santiaguero Norge Carlos Vera y el habanero Brayan Chi.
Después de la justa universal para menores de 18 se incorporó a la Serie Nacional 57 (2017-2018) con su equipo Villa Clara y enseñó argumentos de la buena reputación que traía de la categoría juvenil. Pocas oportunidades le alcanzaron para promediar .308 (ocho imparables en 26 veces al bate) y de sus ocho indiscutibles conectó un jonrón, un triple y un doble. Además de sus dos impulsadas, negoció siete boletos, tres de manera intencional.
A finales de 2017 fue seleccionado para que varios entrenadores japoneses observaran sus habilidades en el estadio Latinoamericano. Lo acompañaron en esa suerte de tryout sus comprovincianos Yosver Zulueta, Pablo Luis Guillén, Javier Mirabal, Norel González y José Carlos Rodríguez.
Una vez probado en el torneo élite de nuestro país, el jugador de cuadro villaclareño decidió que era el momento indicado de marchar de la Isla en busca de un contrato profesional con alguna organización de Grandes Ligas. Dicha decisión la tomó en 2018 y su destino final fue República Dominicana, campamento de cientos de jugadores antillanos que anhelan el sueño de llegar al béisbol rentado.
Durante su estancia en territorio quisqueyano, el atleta nacido en el municipio Cifuentes aprovechó bastante el tiempo para trabajar en cuestiones importantes en pos de una firma, como son ganar en masa muscular, el bateo de largo metraje, la velocidad de home a primera, la aceleración y potencia del swing y un brazo fuerte.
Algunos meses después, Michel vendía una versión muy mejorada de él como pelotero y ese notable progreso no escapó de la atención de los Rojos de Cincinnati. El interés por los servicios del súper prospecto creció y no terminó hasta que ambas partes sellaron un acuerdo el 2 de julio de 2019. Triana firmó por 1.3 millones de dólares.
Ese año no jugó con ninguna sucursal de los Rojos, en tanto continuó arreciando su preparación en Dominicana. Todo estaba listo para que en 2020 comenzara a demostrar en Ligas Menores los motivos por los que su club le ofreció un contrato millonario. Sin embargo, como todos saben, apareció la COVID-19 y estropeó los planes de numerosos deportistas, entre ellos los del joven cubano.
En octubre debió participar en la Instructional League, sin embargo, de acuerdo al sitio web Reds Minor Leagues, surgieron problemas para obtener su visa de trabajo a tiempo y permaneció en República Dominicana preparándose.
Sin embargo, cuando parecía que este año finalizaría y el pelotero de 21 abriles no tendría acción, en la noche del jueves pasado, el elenco Águilas Metropolitanas, de la Liga Profesional de Panamá, informó el fichaje de Michel como su primer importado.
Así que ya saben, después de un tiempo considerable, podremos ver a este gran talento en juego nuevamente a partir del 8 de enero, cuando empiece la atípica temporada invernal de la pelota canalera. Hasta ahora, él es el único cubano confirmado allí.
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