Muy a menudo la suerte acompaña a unos y abandona a otros. Ayer, los Charros de Jalisco recibieron la fría noticia de que no podrán contar más en los play-off de la Liga Mexicana del Pacífico con el lanzador cubano Elián Leyva, su principal carta de triunfo y probablemente el mejor pitcher del circuito azteca esta contienda. En cambio, para Leyva su ausencia del resto de la postemporada, lejos de enfadarlo, indiscutiblemente lo puso a brincar de alegría por el golpe de suerte que eso implica para él.
El serpentinero mayabequense recibió este lunes la importante información de que el club de Grandes Ligas al que pertenece, los Bravos de Atlanta, lo solicitó para invitarlo a los entrenamientos primaverales, de donde pudiera abrirse un lugar en el equipo principal, de continuar con las excelentes actuaciones que enseñó en su debut en la pelota invernal mexicana.
Nacido en San José de las Lajas y próximo a cumplir 30 años, Elián se convirtió esta temporada en el quinto jugador de la historia de la liga que consigue la triple corona de pitcheo, al mostrar efectividad de 2.02, con seis triunfos y propinar 67 ponches. Además el diestro, que perdió en solo dos partidos, exhibió un WHIP de 1.08, regaló 23 boletos en 75.2 entradas, en las que soportó 59 imparables y cinco jonrones. La última vez que un lanzador se llevó la triple corona fue en 2004, cuando Francisco Campos lo logró con los Venados de Mazatlán.
Leyva, quien reside en España desde su salida de Cuba, lanzó en siete Series Nacionales con los equipos de La Habana, Mayabeque y como refuerzo de Industriales en la contienda 53. En noviembre de 2016 firmó un contrato de Liga Menor con los Bravos de Atlanta, tras reflejar brillantes estadísticas con el equipo C.B Barcelona de la División de Honor ibérica. Estaba previsto para iniciar hoy por los Charros en el play off contra los Tomateros de Culiacán.
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