“¿Y que tú quieres que te den?
Dime, ¿qué es lo que tú quieres que te den?
¿Y que tú quieres que te den?
Pídele a Changó, para que te sientas bien.
Desde el África vinieron y entre nosotros quedaron.
Por eso pídele a tu santo, pídele a tu santo otra vez
Voy a pedir pa’ ti, lo mismo que tú pa’ mí…”.
En 1993, Y qué tú quieres que te den era un éxito rotundo en Cuba y en algunas partes del mundo. Aquella unión del son más sabroso de la Isla con las raíces yorubas se convirtió en un hit que consolidó aún más, si es que era posible a esas alturas, a Adalberto Álvarez como uno de los compositores y autores más legendarios de la historia musical de nuestro país.
Sin embargo, si aquel temazo llegó a lo más alto de las listas, también fue gracias a la melodiosa voz líder que fue acompañada por un particular rapeo del Caballero del Son. La claridad y la potencia que salían de la garganta de Jorge Luis Rojas le dieron a la canción un sello que ha llegado intacto hasta nuestros días.
Rojitas, apodo con el que se le conoce, nació el 8 de febrero de 1965 en La Habana, aunque una buena parte de su infancia la pasó en Londres, capital del Reino Unido. Regresó a Cuba con alrededor de 10 años y, por ese entonces, inició sus estudios de canto.
Durante largo tiempo recibió clases de grandes profesoras como Argelia Fragoso y América de Armas, y en ese lapso también dio sus primeros pasos como futura estrella.
Su primer vínculo, más o menos oficial, comenzó en 1981, año en que se unió a los hermanos Rolando y Humberto Padrón en lo que llamaron trío HR. Luego, en el ’82, mientras se encontraba cursando su carrera, se juntó con el grupo Tampa, alineación vocal con la que alcanzó reconocimiento en varios festivales universitarios del país.
Mientras fue parte de aquel conjunto, coincidió con Alfredo Hernández, junto a quien formaría, eventualmente, el dúo Evocación. Ambos se dedicarían luego, desde 1984 hasta 1989, a la trova tradicional, género al que hicieron un gran homenaje.
Con Evocación, Jorge Luis fue dándose a conocer en toda Cuba, pues la dupla logró no solo destacar en diferentes espacios dedicados exclusivamente a la trova, sino en, prácticamente, todos los medios de comunicación de la Isla, lo cual hizo que su rostro y, sobre todo, su fabulosa voz, llamaran la atención del público y de algún director de orquesta.
Su participación en el Festival de Varna, Bulgaria, en el ’89, a donde asistieron acompañados de la banda Sierra Maestra, Albita Rodríguez, Martha Campos y José Antonio Quesada, fue un momento significativo en su carrera, posiblemente el que terminara por darle el empuje definitivo para dar el siguiente salto profesional.
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Paralelamente a esta etapa, comenzó a actuar en centros nocturnos con la banda Oasis, centrada en la línea del pop, rock, funk, blues, jazz y country, variantes musicales de las que siempre fue admirador. Con ellos estuvo hasta 1988, y en esos años fue notable la relación creativa que estableció con Jorge Byron, junto al cual compuso unos cuantos temas.
La llegada de los 90 trajo a Rojitas nuevas oportunidades de trabajo, que incluyeron su incorporación a las agrupaciones Cinquillo Cubano y Clave 5, ambas incluidas en los espectáculos que se celebraban en las veladas de los hoteles Capri y Habana Libre.
En 1991 empezó a formar parte de la orquesta encabezada por el maestro Adalberto, momento que dio un giro a su recorrido como cantante de éxito. Con aquel mítico single dedicado a lo orishas que navegaron desde África hasta el Caribe, llegó a la cima y, gracias a ello, ganó la inercia necesaria para lanzarse como solista.
En 1994 terminó su trayecto con el Son de Álvarez, luego de haber grabado los álbumes Y qué tú quieres que te den (1992) y Dale como E’ (1993), que pusieron a bailar al público cubano e internacional.
Tras este paso, estuvo un año planificando su próximo movimiento. Meses más tarde, en el ’95, llegó la fundación de su propio grupo, el cual se mantuvo en activo por casi una década. Esa iniciativa personal le permitió viajar a más de una docena de países y publicar los discos Regálame tu encanto (1995), La fiesta del caribe (1997), Soy salsero soy cantante (1999) y, por último, Tierra santa, del 2004, año en que concluyó el proyecto.
Durante aquel ciclo, tuvo, además, la oportunidad de ser presentador de televisión y radio en los programas Tiempos, A media luz, Montado en el aire y Conmigo ven, a los cuales aportó su sensibilidad artística y encanto personal.
A continuación, en 2005, se fue hasta Moscú para encabezar, en calidad de productor y estrella principal, los aclamados espectáculos musicales La fiesta del caribe y Tierra santa, cada uno inspirado en sendos fonogramas realizados con su orquesta.
De Rusia, Jorge Luis se mudó hacia Canadá y se estableció en la internacional urbe de Toronto, donde reside actualmente. Allí, desde 2006 hasta 2010 trabajó en Aquario Productions, agencia que creó y con la que trabajó con bandas como Havana Express, Tumbao Toronto y Cassava Latin Band, además de unirse a estos últimos para grabar el disco Color de rumba. Lanzó sus propias composiciones en álbumes como Por encima de la locura y el recopilatorio Rojitas: Greatest Hits (1995-2005).
Japón, un territorio que ya conocía desde su etapa con Adalberto, fue otro de los sitios a donde llevó su música, pues, entre 2011 y 2014 se dedicó a planificar presentaciones y actuar allá, pero también a trabajar en un estudio como productor en nombre de su agencia, en el cual editó el álbum Habana.
En 2015 reanudó su vínculo con unos viejos conocidos, la Orquesta Cubanismo, con quienes estuvo de gira por ocho ciudades de Estados Unidos. Par de años más tarde, él y su esposa, Elizabeth Gavilla, crearon RoGa Production Music & Arts, empresa que se dedica a la representación, producción, formación artística, promoción y otras actividades relacionadas a la industria musical.
En RoGa están asociados a otros músicos como los cubanos Yeni Valdés (ex de Van Van), Coco Freeman (ex de Adalberto Álvarez), Jessie Riffa (nieta de Lourdes Torres e hija de Lourdes Libertad), Yani Borrell y la cubanoamericana Lucy Grau.
Uno de sus más recientes trabajos, publicado en este mismo 2021, es el single Vengo cantando, que les dejamos a continuación:
Rojitas extraordinario cantante cubano. Una voz unica e inconfundible. Excelente artista , orgullo cubano.
Lo maximo Rojitas . Me encanta . De los mejores cantantes de Cuba