Según Wikipedia, se conoce hoy como yacht rock (rock de yate) a un espectro musical que incluye smooth soul, smooth jazz, rhythm and blues, funk y disco originado en el sur de California y popular entre 1975 y 1984. Estas composiciones, identificadas como «sonido de la costa oeste» (West Coast sound) por aquellos años, fueron rebautizadas –un poco peyorativamente- como yacht rock con el lanzamiento de una serie homónima en el Channel 101 (festival de cortometrajes en la web).
La premisa fundamental de los creadores –y actores– J.D. Ryznar, Steve Huey, Hunter Stair y David Lyons era parodiar el proceso de composición de temas, y no las canciones como tal, que jóvenes y medio-tiempos con billete, disfrutaban mientras navegaban en sus yates a toda vela, una de las actividades de esparcimiento más populares en California.
Con gran ingenio, Ryznar y su tropa re-crean las personalidades de numerosos artistas y ficcionalizan interacciones con otros músicos. Así, vemos a unos Kenny Loggins y Michael McDonald medio infantilones, a un John Oates con tremenda guapería, a un Jim Messina curda, o a Jeff “Skunk” Baxter metiéndole el pie a McDonald para que escriba más éxitos o, de lo contrario, no seguirá tocando con los Doobie Brothers.
Las caracterizaciones físicas y de utilería, o el vestuario de los integrantes de Toto, Peter Cetera, Christopher Cross, Michael Jackson o Hall and Oates, añaden comicidad a las alocadas tramas de cada nueva historia.
Los 12 episodios de la serie muestran una estructura bien definida: se titulan como varios éxitos de yacht rock (What a Fool Believes, Rosanna, FM, Footloose…). Uno de sus creadores, “Hollywood Steve” Huey, DJ y crítico de VH1 y All Music, presenta el capítulo en medio de una situación generalmente embarazosa y ofrece un contexto musical para los siguientes 5 o 6 minutos que cierran, nuevamente, con un comentario. Si bien cada episodio es monotemático y cuenta una historia diferente, hay una especie de hilo conductor en torno al empresario-marinero ficticio Koko Goldstein.
La difusión de los materiales llegó muchísimo más allá de lo posiblemente esperado. Además de los productores y el elenco que seguramente se divirtieron de lo lindo en cada filmación, las caracterizaciones fueron bastante elogiadas y el guion logró captar intuitivamente muchas de las cosas que pasan en el proceso de creación musical.
Artistas como Hall and Oates revitalizaron sus carreras, pues el formato online los conectó con fans más jóvenes. Meses después de la salida de Yacht Rock, Daryl Hall lanzó su propio programa mensual para la web Live from Daryl’s House (al cual dedicaremos otra columna) con 82 episodios durante 11 años y que le permitió mantenerse activo en la tranquilidad de su estudio propio sin exponerse al cansancio de las giras.
En nuestros días, el yacht rock es uno de los géneros que se pueden encontrar en Pandora, Spotify y Sirius XM Satellite Radio y no han faltado giras de bandas tributos que cultivan esa música y que han invitado al escenario a figuras legendarias. Incluso, han corrido rumores sobre un posible concierto o un crucero con los artistas originales de los 70s y 80s, pero esto ha sido prácticamente descartado: más allá de poder juntar a varios talentos, el costo para los espectadores sería muy elevado.
Mientras eso sucede, o no sucede, les propongo explorar los links aquí compartidos y disfrutar de la serie en un divertido viaje al legado musical de décadas anteriores.
Algunas de las principales tramas son:
Episodio 2: Daryl Hall y John Oates, en tono belicoso, retan a Kenny Loggins y a Michael McDonald a un duelo de compositores. Peter Cetera y Christopher Cross son parte del tumulto.
Episodio 5: Toto recibe el encargo de componer un tema meloso para el álbum Thriller. Michael Jackson piensa que Human Nature es como retroceder en su carrera después de haber trabajado con Eddie van Halen en Beat It.
Episodio 7: Desesperados por encontrar un estribillo, los raperos Warren G. y Nate Dogg, sin darse cuenta, atropellan en plena calle a Michael McDonald, lo meten en el maletero del carro y terminan el tema incorporándole notas de I Keep Forgetting, hit interpretado por primera vez por McDonald diez años atrás.
Episodio 10: Con un éxito, las agrupaciones Steely Dan e Eagles solucionan una larga e infantil disputa.
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